CAPÍTULO 27#

(NARRA MIREYA) Me puse nerviosa sin saber por qué. Cloeh y Sara me miraban como si fuera un extraterrestre. ¿Tenía que tener miedo? -Y bueno… ¿Hay alguien especial en vuestras vidas?-preguntó Pablo con una notable sonrisa. No té como Cloeh se emocionaba de la nada, y echaba una mirada a Sara. Repito, ¿Tendría que preocuparme? -Seré honesto…sí, la hay. Es una persona maravillosa-pausó-claro, nuestras Directioners no se quedan atrás-dijo Louis con un tono de gracia en su voz. -La verdad, creo que todos tenemos a ese alguien especial en nuestra vida-añadió Liam-pero no nos olvidamos de vosotras, sin vosotras esto no sería posible. -Estoy de acuerdo con Liam-contestaron Niall y Harry a la vez. Y sin decir nada, Zayn se levantó y salió. ¿Le daría vergüenza decir que tiene alguien especial? O peor, ¿Se avergonzaría de mí? Todos los demás le siguieron, incluso Pablo a acompañado de una cámara. Vimos como se dirigían a por una guitarra y micrófonos, ¿Cantarían? No nos avisaron. Sin saber el por qué me puse nerviosa, y al mirar a Cloeh y Sara me puse más nerviosa aún. Me miraban con una sonrisa maliciosa. Daban miedo. Mucho. Y sin decir nada, se levantaron y me cogieron de los brazos, yo no sabía qué hacer, estaba en shock. -Ahora siéntate aquí y no te muevas o te corto el pelo-amenazó Cloeh. Yo tragué en seco. Las luces se apagaron, y yo me puse nerviosa. A los pocos segundos, cinco focos se encendieron y alumbraban a los chicos. Estoy perdida. Suena una melodía que reconozco al instante. Diana. ¿Por qué estoy sentada en una silla frente al público? Niall, Harry, Liam y Louis se quedan a mi derecha, mientras que Zayn se queda a mi izquierda. Cantan la canción. Mi canción favorita. ¿Esto es posible? ¿Es todo un sueño? Pues si lo es, no quiero despertar. Termina la canción y mis ojos están algo llorosos… ¿Quién no lloraría al escuchar esta canción? Y más aún, ¿De las voces de tus ídolos? -Espero que te haya gustado la sorpresa, pero antes, quiero decir algo muy importante al mundo-dijo Zayn algo nervioso. Dirigí mi mirada a Cloeh y a Sara que reían de mi cara de confusión- Hace poco conocí a una chica maravillosa, perfecta para mí. Y la verdad, quiero pedirle algo-habló a la cámara- así qué…-se giró hacia mí- Mire, tengo que decirte que eres la persona que necesito a mi lado, quiero que seas tú con quién comparta mi vida-se puso nervioso, ya que me cogió la manó y la tenía algo temblorosa. Aunque nada comprado conmigo, ¿Qué iba a hacer?- Mireya, ¿Aceptarías ser mi novia?-preguntó- Sé que llevamos poco tiempo conociendonos, pero que de verdad me gustas, por favor, dame una oportunidad-suplicó. Me quedé helada. ¿Qué se supone que debo hacer? ¿Correr? ¿Gritar? ¿Llorar? ¿Bendecir? No sé qué es lo que debía hacer, así que por una vez en la vida, dejé que mi corazón me guiara. Dejando atrás todas las preguntas de mi cabeza. Así que me tiré encima de él-literalmente- y caímos los dos. -Por favor, dime que es un sí-suplico de nuevo entre risas pero algo nervioso. -Pues claro que sí. Me levanté con una sonrisa en la cara, y me encontré a Cloeh y Sara ¿Llorando? Sí, llorando mientras aplaudían y gritaban << ¡BRAVO! >> y se abrazaban a los chicos. ¿Ellas sabían esto? Como la respuesta sería sí, morirían.